Este día frio,
si estuviera yo contigo
te diría quizás las cosas que nunca digo.
Te diría por ejemplo,
que estoy cansada,
que la resistencia de las horas
deja sobre el cielo partido
fragmentos negros,
y observo cada día su reflejo sobre el río
y ya no alcanzo a ver,
tus ojos en lo profundo.
Se ha partido, se ha abierto el cielo.
La espera abisal ya cesó.
Te diría,
un ángel a venido a besarme el olvido,
me ha estrechado en su pálida inocencia,
y yo,mi amor,
le he dado mis brazos
que huían como pájaros moribundos
hacia su mirada pétrea.
Te diría,
ey,
ya no sé a donde ir,
pero puedes seguirme
aunque mi mano ya no tenga fuerza
para ayudarte en el camino.
Ahora soy una veleta acostumbrada
al temporal del tiempo.
Divago en su movimiento,
enderezo el mastil del momento líquido.
Mi amor,te diría.
Que ya no estoy.
Que el camino es piedra y beso
y tropiezo errado.
Que tanta es la niebla
que no puedo ver nada,
pero sé que el azul está debajo,
esperando como un guepardo hambriento.
Y yo,que te diría..
Que necesito la luz,como un castigo.
El sol,como un castigo.
Verte,como un castigo.