Toco tu boca,con un dedo todo el borde de tu boca,voy dibujándola como si saliera de mi mano,como si por primera vez tu boca se entreabriera,y me basta con cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar..
Julio Cortázar

sábado, 19 de octubre de 2013

Sudorípara



Vacío tras vacío
abriendo puertas
de habitaciones desiertas
que dan a precipicios
dulces ideales peripecias juicios de amor
sobre el vicioso trapecio del olvido
en ciertos puertos en ciertas ciudades
en casas que no son hogares
ciertas oquedades entre tiempos venidos
a parecer eternos
las palabras me habían llevado
tan lejos(tanto tiempo)(opaco tiempo)
a oscuros yermos
a vertiginosos parajes 
a laberintos semanales mensuales que se hicieron años
que me hicieron daño como cuando te veo y no puedo tocarte
a pintorescas cimas donde
el pico más alto
estaba en el arte del lenguaje
me aferro me adereza esta sosez que encierra aquel breabaje
sintáctico semántico gramático me complico sin entender
lo que es un presente simple un pasado perfecto una hipérbole doble (con efecto)
el desasosiego que succiona
todos los amaneceres imperfectos todos rotos
trozos sucios putos todo locos esquizofrénicospalpitando
en las alarmas que anuncian un mañana quimérico
siempre un eterno ocaso en la niña del ojo
al despertar que por faltar me falta la sed
entonces trago saliva y esbozo mi resaca
y un monstruo sale de la pared
 y pronuncia iracundo
tu nombre tu soledad
dibuja tu cuerpo de hombre
 la penumbra de tu mirada
desde la mesita de noche hasta el horizonte
y yo solo quiero correr
y me analizo el corazón unos segundos
y no hay dolor
y no hay del todo dolor
y no hay del todo placer
pienso tanto en Alejandra
en Cortázar
pero en tí Corbiere pienso más que en nadie
todos estábais tan tristes
tan solos en las aceras de París
mirando escaparates
avernando en  en la Rue du Cherche Midi
durmeindo en pensiones que huelen a una nostalgia inútil
a orina
a un desamor plastificado en la retina
carne podrida oliendo a despedida
el corazón de un viejo poeta sangrando tinta
sobre la mesa de la cocina
estabais allí
viendo escapar las horas de forma sutil
fumando cigarros persiguiendo los signos de la noche anodina
muriendo de tuberculosis de  timidez tartamudeando
ingiriendo pastillas hasta veros desaparecer
en el secretismo de la madrugada por cualquier esquina
recitando un verso mental-mortal que no llegó ni a la pluma
que dejó viudo aquel papel y muerta de olvido la tinta muda
quiero descansar sobre las palabras
como descansan los viejos en los parques
quiero arrancarte
olvidar que soy capaz de amarte
joderte
quiero tirarte
como trozos de pan duro a los estanques.

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