Así como marcharse
volver
Hostil
al punto de partida
con la pupila desgastada
de mirar a ninguna parte
desde ventanas
de un solo matiz
un solo escenario
triste penumbra en el regreso
mi anhelo fue
jamás haberme marchado
para no ver hoy
el camino desdibujado
de mi partida
para volver a partir
con maletas de desastres
cuando el recuerdo
haga de la piel escama
más vale soñar
soñar de almohada y ventana abierta
soñar de viento en la sábana
y pies desnudos
pues a día de hoy
conozco más al hombre
por diablo
que por viejo
y es preferible la ensoñación
al extrasístole de estar despierto
en una realidad repetida
volver
como has vuelto mil veces
dice la canción
café y pálpito tieso
de las tres de la tarde
rutina perenne
infernal cámara de gas
de la que emana
vapor de sueños
agrietados
vómito del aire
sobre mi tejado
por creer en la pecera
antes que en el mar
no permitas caprichos
a tu suerte de novato
novato de vida
no la esperes pues
en cualquier esquina
no vendrá
sin un grito agudo de conciencia
sin un escarmiento prepotente
contra ti mismo
no necesitamos
teorías
si prácticas no habitamos
después del fantasmal discurso
aplastante y aburrido
del arte
coge tus manos
a ser posible con tus manos
y traza un esquema de ideas
sin dibujarlas
sin oírlas
sin capturarlas
sólo
piénsalas
y trabaja con desaliento
antes de tocar el cristal
y conocer el límite
de tu cárcel de agua
piénsalas
y educa pues
el mundo es un tipo listo
pero ignora
lo esencial
diálogo eterno
con la palabra
con mi esqueleto
con el parásito humano
que me habita
inconsciente
estando sin ser
una estantería de ilusiones
cebada de polvo y silencios
solitarios
cobijados en el deseo
que de todo se apodera
que de lo sólido
hace ceniza
torpemente
desvaneciendo todas las murallas
pero jamás las del olvido
jamás las del pasado
jamás las del futuro
lastre de infortunio que se arrastra
maldito como yo
como todos sin saberlo
lo sois
ocultamente
detrás de vuestra piel
hay un veneno sublime
poderosa bruma inhumana
pellejo diabólico del ser
que en su fealdad destaca
más que cualquier tesoro
cualquier materia
yo habito en su belleza
en la belleza de lo terrible
estaré por siempre
camuflada en mi cuerpo
atenta a cada sorbo
del elixir enfermizo de la entraña
humana y retorcida
que mi carne esconde
que vuestra carne esconde
aquello que evitáis
me alimenta de paz
por saber que existe
y no temerlo
y sin ese algo
yo sería nadie
un nadie de todos
un alma atrofiada de dicha
un ser sin ser
otra vez
habiendo sido
tantas veces!
llegar siempre a un mismo lugar
tomando caminos dispares
es señal
de que estamos
en el lugar correcto
llegar al mismo verso
sin querer
sin pensarlo
es señal
de su pureza
de su verdad
y puede
que estos versos
ya no sean para ti
un aliento
que ni si quiera
de distracción te sirvan
pero grabé tu nombre en cada letra
con el mismo cuchillo
con el que
abriste la herida
la que el tiempo sostiene
esa que el reloj enumera
en cada tic
en cada tac
parpadeo efímero
imagen por imagen
fotogramas de nuestra existencia
un flash en la pupila tatuado
de cada instante
nuestro
que por capricho regresa
al portal de la memoria
mendigando la atención
que ya no le presto
mientras me engaño
por no llorar más
corazón en estado líquido
por la mejilla
cuajada de nostalgia
y me pregunto sin más
qué le debo al mundo
que tanto me quita
que tanto me da
y sin respuesta trasnocho
más de una madrugada
y todo lo que acierto
se convierte en superfluo
cuando mis dedos
se calan de mar
cuando el viento humilde
sacude las hojas
cuando la quietud desnuda
rompe la pared
y estira el espacio
y a mí con el
al yo
al yo que soy sin ser
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