Tu que no pareces hablar
el lenguaje de las aves
cuéntame como aprendiste a volar
y a caer
tan pronto
como de repente
una tarde
te sentiste tonto triste y cobarde
y decidiste
acomodarte en un margen
ver germinar la mortaja
dime como atajar
para bajar tanto la cabeza
sin llegar a odiar tu imagen
tú
no hablas el lenguaje de las aves
tú has inventado tu propio código
el último temblor
del dolor el hijo pródigo
una erupción constante
un llover
una oscuridad perenne
uns incesante necesidad de desastre
amor sin postre
debilidad
bendito niño sin nombre
solo en esa cumbre
que aleja al presente del hombre
hambre de la soledad
de las soledades
habitaciones que son ciudades
vigilan tus paso
farolas construyen tu sombra
con el negro carbón que dejan
de rastro tus oquedades
tus necios vacios
tu falso traje de orgullo
acacias caidas sobre el beso tuyo
con tus manos que son como verdades
mas intuyo
que mientes amigo
tu quisiste pensar
que conocías el lenguaje de las aves
tu hablas tu propio lenguaje
tu vuelo
ya cesó
ya cesó.
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